Cucarachas hospitalarias
Por Alfredo Zurita (*)
http://datachaco.com/noticia.php?numero=27970
La TV nacional ha difundido extensamente un video filmado en Formosa que gira alrededor de la presencia de cucarachas en el hospital materno infantil de la capital.
Se trataría de una "investigación" realizada a partir de un video enviado por un anónimo, mostrando el hacinamiento, suciedad y precarias condiciones de la sala de psiquiatría del hospital Central. Descuento que esto es muy probablemente cierto, porque es así en casi todas partes. Basta ver los escándalos periódicos en relación a los manicomios. Cementerios de vivos que molestan a la sociedad.
El servicio de limpieza del hospital materno infantil esta tercerizado, según asevera el director, quien ante una pregunta improcedente del periodista; "cumple el hospital con las pautas de la Organización Mundial de la Salud?", sobreactúa respondiendo, que las cumple, "no solo las de la Organización Mundial de la Salud, sino también las de la Organización Panamericana de la Salud, y las sociedades científicas". Respuesta absurda a una pregunta de quien obviamente poco conoce del tema.
Aunque el video se dirige a mostrar aspectos muy evidentes de déficits de limpieza, macroscópicos, como cucarachas en rincones, y líquidos de bolsas rotas con residuos hospitalarios que son "manguereados" hacia la calle, el problema es mucho más profundo. Se trata de proteger a los pacientes de infecciones adquiridas en el hospital, sumamente peligrosas, en la medida que los microbios que viven en el ámbito hospitalario (o sanatorial), invisibles al ojo, son habitualmente resistentes a los antibióticos.
Ninguna cadena es más fuerte que el más débil de sus eslabones. La asistencia hospitalaria es una cadena compleja, y la calidad final de la atención depende de todos sus eslabones. El más importante de todos, según las investigaciones realizadas, la disponibilidad de tiempo de enfermería por paciente, aunque el profano atribuya la máxima importancia al médico tratante. Se va al hospital o sanatorio tal, porque allí atiende fulano o mengano, cuando también sería importante conocer la tasa de infecciones de los pacientes hospitalizados, o la disponibilidad de tiempo de enfermería por paciente.
De allí la importancia del trabajo en equipo. El resultado del transplante cardiopulmonar a Sandro dependía tanto de la pericia de los médicos que lo realizaron, como de la perfección del trabajo del personal de limpieza y de enfermería. Recordemos que Sandro murió finalmente de una infección hospitalaria.
Pero que rol se adjudica a este personal?. Mal pago, generalmente precarizado cuando el servicio esta tercerizado, es anónimo. En tanto parezca que "está limpio", y sin cucarachas, el público se dará por conforme.
Un comité de vigilancia de infecciones hospitalarias es indispensable por tanto, aunque no muchos establecimientos lo tienen. Normas y controles son el mecanismo habitualmente utilizado para reducir el problema.
Uno de mis profesores realizó una experiencia interesante. Convocado para resolver el problema de infecciones postoperatorias en un hospital, se le describieron las normas, y el "intensificado" mecanismo de control sobre el personal de limpieza. Abordó el problema de una forma menos convencional. Reunió al personal de limpieza de los quirófanos, les pregunto su opinión sobre las causas del problema, les explicó la importancia de su trabajo sobre el pronóstico de los pacientes, y les pidió poner en práctica sus ideas para resolver el asunto.
Durante varios días las infecciones postoperatorias se mantuvieron, pero luego comenzaron a descender. Simplemente el personal estaba aplicando, por su propia decisión, las normas que se les imponían, y eran obsesivamente controladas por las enfermeras supervisoras. Se trata de un fenómeno bien conocido en el mundo de la organización.
El personal obligado a trabajar con normas y controles estrictos se rebela y boicotea a la organización, en forma consciente o inconsciente. El film "Tiempos Modernos" de Chaplin, que ridiculiza esto, fue un grito desesperado de los obreros frente a las nuevas formas alienantes de organización industrial, sólo centradas en las ganancias.
La tercerización de la limpieza, muy frecuente en los hospitales y sanatorios agrava el problema. Su objetivo no es mejorar la atención sino abaratarla, en un contexto donde en el sistema público, el personal de planta, protegido por reglas burocráticas, y espesas madejas de punterismo, y recomendaciones de caudillos, escapa de las tareas aburridas y/o desagradables.
La provincia de Formosa tiene el triple de empleados públicos, en relación a su población, que la provincia de Buenos Aires, por lo que la necesidad de tercerizar servicios es poco explicable. En lo privado el objetivo es simplemente maximizar ganancias en un marco regulatorio débil.
El déficit de personal de enfermería, que iba a ser objeto de un programa especial durante la gestión de la ministra Ocaña ha sido abandonado por el nuevo ministro nacional. Se requeriría como en el caso de los docentes un pacto nacional que garantizara un salario mínimo a este personal, evitando el muy frecuente doble empleo, que finalmente termina con personal agotado, y expuesto inevitablemente a errores en la aplicación de tratamientos.
El video presentado ha sido elaborado, con técnicas que parecen más bien publicidad de impacto, que periodismo de investigación. Se limita a mostrar, en forma interminable, cuatro o cinco tomas de cucarachas en rincones. El gobierno por su parte envía a personal subalterno a dar la cara frente a los periodistas, incluyendo atacarlos, en tanto los altos funcionarios desaparecen. Todo da la impresión de un mundo de cucarachas...humanas.
(*) Alfredo Zurita. Profesor Titular de Salud Pública. Facultad de Medicina. UNNE
Por Alfredo Zurita (*)
http://datachaco.com/noticia.php?numero=27970
La TV nacional ha difundido extensamente un video filmado en Formosa que gira alrededor de la presencia de cucarachas en el hospital materno infantil de la capital.
Se trataría de una "investigación" realizada a partir de un video enviado por un anónimo, mostrando el hacinamiento, suciedad y precarias condiciones de la sala de psiquiatría del hospital Central. Descuento que esto es muy probablemente cierto, porque es así en casi todas partes. Basta ver los escándalos periódicos en relación a los manicomios. Cementerios de vivos que molestan a la sociedad.
El servicio de limpieza del hospital materno infantil esta tercerizado, según asevera el director, quien ante una pregunta improcedente del periodista; "cumple el hospital con las pautas de la Organización Mundial de la Salud?", sobreactúa respondiendo, que las cumple, "no solo las de la Organización Mundial de la Salud, sino también las de la Organización Panamericana de la Salud, y las sociedades científicas". Respuesta absurda a una pregunta de quien obviamente poco conoce del tema.
Aunque el video se dirige a mostrar aspectos muy evidentes de déficits de limpieza, macroscópicos, como cucarachas en rincones, y líquidos de bolsas rotas con residuos hospitalarios que son "manguereados" hacia la calle, el problema es mucho más profundo. Se trata de proteger a los pacientes de infecciones adquiridas en el hospital, sumamente peligrosas, en la medida que los microbios que viven en el ámbito hospitalario (o sanatorial), invisibles al ojo, son habitualmente resistentes a los antibióticos.
Ninguna cadena es más fuerte que el más débil de sus eslabones. La asistencia hospitalaria es una cadena compleja, y la calidad final de la atención depende de todos sus eslabones. El más importante de todos, según las investigaciones realizadas, la disponibilidad de tiempo de enfermería por paciente, aunque el profano atribuya la máxima importancia al médico tratante. Se va al hospital o sanatorio tal, porque allí atiende fulano o mengano, cuando también sería importante conocer la tasa de infecciones de los pacientes hospitalizados, o la disponibilidad de tiempo de enfermería por paciente.
De allí la importancia del trabajo en equipo. El resultado del transplante cardiopulmonar a Sandro dependía tanto de la pericia de los médicos que lo realizaron, como de la perfección del trabajo del personal de limpieza y de enfermería. Recordemos que Sandro murió finalmente de una infección hospitalaria.
Pero que rol se adjudica a este personal?. Mal pago, generalmente precarizado cuando el servicio esta tercerizado, es anónimo. En tanto parezca que "está limpio", y sin cucarachas, el público se dará por conforme.
Un comité de vigilancia de infecciones hospitalarias es indispensable por tanto, aunque no muchos establecimientos lo tienen. Normas y controles son el mecanismo habitualmente utilizado para reducir el problema.
Uno de mis profesores realizó una experiencia interesante. Convocado para resolver el problema de infecciones postoperatorias en un hospital, se le describieron las normas, y el "intensificado" mecanismo de control sobre el personal de limpieza. Abordó el problema de una forma menos convencional. Reunió al personal de limpieza de los quirófanos, les pregunto su opinión sobre las causas del problema, les explicó la importancia de su trabajo sobre el pronóstico de los pacientes, y les pidió poner en práctica sus ideas para resolver el asunto.
Durante varios días las infecciones postoperatorias se mantuvieron, pero luego comenzaron a descender. Simplemente el personal estaba aplicando, por su propia decisión, las normas que se les imponían, y eran obsesivamente controladas por las enfermeras supervisoras. Se trata de un fenómeno bien conocido en el mundo de la organización.
El personal obligado a trabajar con normas y controles estrictos se rebela y boicotea a la organización, en forma consciente o inconsciente. El film "Tiempos Modernos" de Chaplin, que ridiculiza esto, fue un grito desesperado de los obreros frente a las nuevas formas alienantes de organización industrial, sólo centradas en las ganancias.
La tercerización de la limpieza, muy frecuente en los hospitales y sanatorios agrava el problema. Su objetivo no es mejorar la atención sino abaratarla, en un contexto donde en el sistema público, el personal de planta, protegido por reglas burocráticas, y espesas madejas de punterismo, y recomendaciones de caudillos, escapa de las tareas aburridas y/o desagradables.
La provincia de Formosa tiene el triple de empleados públicos, en relación a su población, que la provincia de Buenos Aires, por lo que la necesidad de tercerizar servicios es poco explicable. En lo privado el objetivo es simplemente maximizar ganancias en un marco regulatorio débil.
El déficit de personal de enfermería, que iba a ser objeto de un programa especial durante la gestión de la ministra Ocaña ha sido abandonado por el nuevo ministro nacional. Se requeriría como en el caso de los docentes un pacto nacional que garantizara un salario mínimo a este personal, evitando el muy frecuente doble empleo, que finalmente termina con personal agotado, y expuesto inevitablemente a errores en la aplicación de tratamientos.
El video presentado ha sido elaborado, con técnicas que parecen más bien publicidad de impacto, que periodismo de investigación. Se limita a mostrar, en forma interminable, cuatro o cinco tomas de cucarachas en rincones. El gobierno por su parte envía a personal subalterno a dar la cara frente a los periodistas, incluyendo atacarlos, en tanto los altos funcionarios desaparecen. Todo da la impresión de un mundo de cucarachas...humanas.
(*) Alfredo Zurita. Profesor Titular de Salud Pública. Facultad de Medicina. UNNE
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