12 abr 2016

Cuando parir a un hijo puede ser la experiencia más angustiante




Varias salas de maternidad dejaron de funcionar en la provincia. Advierten que faltan médicos

El sistema de salud pública entrerriano se pone a prueba a cada momento, enfrentando dificultades cotidianas y decisiones políticas que generan rechazos entre profesionales, trabajadores y pacientes. Así planteadas las cosas, con frecuencia desde los diferentes hospitales de cabecera se advierte por la falta de insumos, de recursos humanos y de una óptima estructura edilicia que resiente la atención a un sector de la población generalmente de bajos recursos. Todos los actores del engranaje sanitario se esfuerzan en corregir las falencias y mejorar una realidad plagada de necesidades, pero casi siempre son esfuerzos mínimos que no alcanzan para disimular un problema mayor. En un intento por visibilizar parte de un cuadro clínico que asoma con pronóstico reservado, UNO se ocupó de la situación de las salas de maternidad en los hospitales de las cabeceras departamentales, un servicio que de acuerdo a un relevamiento encarado por las delegaciones de ATE tiende a desaparecer por diferentes causas. Este año la primera señal de alerta surgió en la ciudad de Federal, donde una masiva marcha de vecinos autoconvocados evitó el cierre de la sala de partos del hospital Justo José de Urquiza, un servicio que atiende a unas 30 parturientas mensualmente, según estadísticas de los propios habitantes.

Esta movilización bastó para que las autoridades dieran una respuesta a la demanda y en pocas horas las autoridades se comprometieron a mantener en funcionamiento la sala que concentra la atención perinatal. En realidad, que el servicio haya seguido en pie no quiere decir que las cosas haya mejorado. "Roguemos que no se descomponga ninguna embarazada, ni pase nada grave, ya que está cortada la ruta 22. Se dan cuenta cuando pedimos anestesistas y más profesionales de la salud: no es política, es una necesidad", publicó en su cuenta de Facebook Mariale Andrine, una de las voceras de la manifestación realizada el 12 de marzo por las calles de la ciudad. La mujer escribió el mensaje el 7 de abril, cuanto la ruta de acceso a Federal estaba cortada y la única alternativa para evitar el aislamiento era la ruta nacional 127. En diálogo con UNO aseguró que el anestesista realiza una guardia semanal los jueves cuando se programan las cirugías. "¿Y si hay una cesárea programada?", sembró la duda respecto a un dilema donde lo que se pone en juego es el derecho a  la salud. Actualmente las mujeres con embarazos de riesgo son derivadas al hospital Delicia Masvernat de Concordia. "Necesitamos más profesionales, especialistas, ya que contamos con un solo cardiólogo", recalcó, y avisó que si se mantienen estas condiciones convocarán a otra marcha.

Un diagnóstico que preocupa

La conducción de la Asociación de Trabajadores del Estado de Entre Ríos (ATE) impulsó un monitoreo de los diferentes hospitales de menor complejidad y en particular, del funcionamiento de cada una de las áreas. De este trabajo surgió que los hospitales de Feliciano y Diamante vieron resentido el servicio de Maternidad por diferentes razones, por un factor que a esta altura es moneda corriente: la falta de anestesistas, en mayor medida, aunque también  suele suceder algo parecido con otros profesionales de la Medicina. 

"Hace 1 año que se cerró la sala de partos por la falta de ginecólogo y en ese caso se deben hacer derivaciones a la ciudad de Chajarí", recordó el secretario general de ATE Feliciano,  Ricardo Molina. El gremialista manifestó que ante una emergencia las parturientas son derivadas al Instituto Privado de Pediatría de Concordia o a dos centros médicos de Chajarí: el hospital Santa Rosa y a una clínica privada. "El año pasado me tocó vivirlo con mi hija: por la falta de médicos la tuve que trasladarla primero a Chajarí y después a Concordia. Nació con problemas respiratorios", relató acerca de una experiencia que suele ser angustiante.

El dirigente de ATE reveló que esto descubre una problemática que afecta a personas de bajos recursos, que al tener que trasladarse está obligada a gestionarse hospedaje y alimentación. "Desde ATE casi siempre respondemos a esta demanda", acotó.

De acuerdo a los libros de reporte de la Maternidad del hospital Francisco Ramírez, de cada 10 parturientas, ocho se terminan derivando, precisaron desde el gremio estatal. "Es un servicio indispensable, pero ocurre que están los profesionales pero no quieren venir", remarcó. Al hacer un análisis más profundo respecto del tema, Molina rechazó el cierre de este servicio, pero a la vez consideró: "Se trata de evitar la muerte infantil, porque si te falta el anestesista tenés que cerrar ya que existe un protocolo de obstetricia y  pediatría".

La misma problemática afecta a Diamante  donde el 90% de los partos se derivan al hospital San Roque de Paraná. Este porcentaje revela un problema con el que conviven los trabajadores diariamente y que repercute en un sector siempre postergado de la población. "No tenemos profesionales de manera permanente y desde hace dos años no le podemos encontrar una solución", especificó Marcial Herdt, secretario general de ATE Diamante. El sindicalista señaló  que en la sala de partos se atienden entre dos y tres partos mensuales, pero generalmente se trata de aquellos que son programados. "El servicio sigue abierto, pero igualmente hacemos derivaciones porque no se puede prestar la atención requerida", planteó Herdt. 

Sobre la situación puntualizó  que el anestesista que se desempeña en el nosocomio de la Ciudad Blanca reside en la localidad de General Ramírez y llegar hasta su lugar de trabajo le demanda una hora de viaje. El dirigente explicó que el San José es un hospital de nivel 4 cabecera, pero pese a contar con esa calificación presenta necesidades. "Nosotros estamos para defender los derechos de los trabajadores, pero todos estamos afectados por este problema", indicó. De la misma manera le apuntó a los bajos salarios de los médicos como uno de los factores que atentan contra la posibilidad de brindar un parto seguro. "Los sueldos son bajos, entonces es poca la injerencia que podemos tener", reflexionó. 

Radiografía de una problemática

Desde ATE provincial se informó a UNO que además de los inconvenientes informados en Feliciano o Diamante, también la problemática alcanza a otras localidades. En lo que respecta al servicio de Pediatría, en San Salvador los partos se derivan a Concordia; en Basavilbaso se derivan a Concepción del Uruguay, mientras que en Villaguay se tomó la misma determinación. En el caso de Nogoyá presenta una variante; se realizan únicamente partos naturales, lo demás se termina derivando. 

El secretario general de ATE en Rosario del Tala, Leonardo Santa Cruz aseguró que no tienen garantizado el servicio de anestesiología los siete días de la semana. "El tema de la falta de anestesistas es algo muy complejo y que también complica el servicio de cirugía", repasó. 

Por otro lado, mencionó que ante la eventualidad de producirse una derivación se genera un gasto muy grande para la familia de la parturienta. "Si hay que derivar lo hacemos hacia Concepción del Uruguay", detalló. 

Sin Pediatría en Gualeguay

Por la falta de pediatras, cerraron la sala de Neonatología en hospital San Antonio de Gualeguay, lo que implica que el hospital Centenario de Gualeguaychú reciba casi todas las emergencias.  Según informó El Día de Gualeguay, actualmente hay dificultades para conseguir profesionales en el hospital de esa ciudad y, por el momento, sólo se puede acceder a la guardia pediátrica. Mientras que en la sala de internación para niños, los bebés prematuros de hasta 38 semanas de gestación, deben derivarse a la  Neonatología del Centenario.

Hospitales sin médicos

Hospitales sin médicos: pese a los incentivos, no logran cubrir las vacantes en Provincia

Crisis en el sistema público por las malas condiciones de trabajo y la inseguridad

Hay 300 cupos para ocupar en forma urgente. Los especialidades que más faltan son pediatras, neonatólogos, obstetras, parteros y terapistas.


Los hospitales de la Provincia de Buenos Aires resultan poco tentadores para los médicos especialistas: cada vez es más difícil cubrir las vacantes y se registran casos de servicios que están cerrados por falta de profesionales. Las mayores carencias se dan en terapia intensiva, pediatría, neonatología y obstetricia (obstetras y parteros). Aun cuando en Buenos Aires modificaron la carrera hospitalaria para que los médicos (y otros trabajadores sanitarios) se puedan jubilar con 50 años de edad y 25 de servicio (cinco menos que el resto de la administración pública), no se logran completar las nóminas en los centros asistenciales.

Según un relevamiento del Ministerio de Salud bonaerense, hay 300 cupos de especialidades "críticas" que se deben ocupar en forma "urgente". La consecuencia: están cerrados por falta de personal cuatro servicios. La maternidad y neonatología del hospital Fiorito de Avellaneda; el área de pediatría del Perón de esa ciudad; el servicio de anatomía patológica del Alende de Mar del Plata y la terapia intensiva del Meléndez de Adrogué.

El porqué de este desinterés: el sistema público tiene deficiencias edilicias, problemas de seguridad y bajos sueldos. Un especialista con más de 10 años de trayectoria percibe poco más de 18 mil pesos por mes (en el régimen nacional el salario es de entre 30 y 35 mil pesos) y un residente, por hacer 36 horas semanales, percibe $ 12 mil.

Según explicó a Clarín el secretario del Colegio de Médicos de La Plata, Julio Moreno, "estos faltantes repercuten de manera negativa en la atención diaria de todo el sistema de salud. Los magros sueldos y la violencia e inseguridad que se vive a diario dentro de los hospitales son algunos de los factores determinantes de esta situación".

En el Ministerio de Salud explicaron que "la falta de estas especialidades alcanza al sistema público y privado". Y anticiparon que es prioridad ocupar estos "sectores críticos" en el transcurso de este año. "Vamos a convocar a los actores del sistema para revisar las condiciones laborales y diagramar un programa de estímulos e incentivos para los profesionales", dijo la ministra de Salud, Zulma Ortiz.

La iniciativa incluye un plan de obras para "mejorar la situación edilicia" y la seguridad. Además, proponen modificar la carrera hospitalaria para pagar mayores sueldos a quienes realizan capacitación permanente. La idea es pagar o becar a quienes realicen maestrías o doctorados en universidades nacionales y en el exterior. Ortiz adelantó que avanzan en acuerdos con municipios para fomentar la radicación de especialistas en hospitales del interior. "En la zona sur de la provincia queremos que los municipios puedan ofrecer alojamiento y otros incentivos para que quienes se forman en una especialidad puedan radicarse definitivamente", ejemplificó Ortiz.

Según un estudio publicado por la Universidad Abierta Interamericana, más de la mitad de los médicos de un hospital del Conurbano tenían síndrome de "burnout" por el estrés laboral. El trabajo se hizo entre 105 profesionales de servicios de pediatría, obstetricia, terapia intensiva y neonatología. Otra de las propuestas en estudio es modificar el régimen de guardias: pasar de 24 a 12 horas, para evitar las situaciones de estrés y agotamiento, dijeron las autoridades.

En poco más de una semana, comienza el período de selección para cobertura de residencias en los hospitales de la Provincia. El 22 de abril, se evaluará a 2.500 graduados (en su mayoría médicos de diferentes especialidades), que aspiran a completar su formación de posgrado en alguno de los 1.450 cargos de residencia que ofrece el ministerio en los 130 hospitales públicos y establecimientos de salud provinciales. Para este año, se incrementó la oferta de cargos para obstétricas, médicos pediatras y neonatólogos. Deberán trabajar en un sistema que tiene –según admiten en el Gobierno– 57 hospitales "en situación muy crítica" de infraestructura y cuatro que están "destruidos y deberían construirse de nuevo". Un panorama que no parece muy seductor para iniciar la carrera laboral. 

Faltan médicos y ahora envian a residentes al interior

Construimos el sistema de salud, pese a las dificultades, con mayores vínculos en recursos humanos. Hemos vinculado a más de 3.000 profesionales de acuerdo a lo que permite la ley", mencionó el ministro de Salud, Dr. Antonio Barrios, quien agregó que hay una mala distribución del personal médico en todo el país.

"Somos pocos dentro del sistema; 5.700 médicos casi el 100% tiene hasta tres vínculos. No existe cantidad de médicos suficiente", refirió el Ministro.

Pasantías rurales, para paliar necesidades

Barrios expresó que con la incorporación contínua de médicos a las pasantías rurales, año a año, se logra enviar profesionales especializados a todo el territorio nacional.

"La pasantía rural fue una muy buena idea y nosotros en esta administración nos animamos a implementarla. Ahora hay especialistas que están en el interior y se quedan. Hay un crecimiento", dijo.

Barrios explicó que varios servicios que cuentan con la infraestructura, no pueden habilitar servicios, como los de hemodiálisis, debido a la escasez de nefrólogos. "El crecimiento es paulatino que llevará una década para contar con suficientes profesionales", explicó.

Faltan médicos: los hospitales bonaerenses no logran cubrir las vacantes



Según el relevamiento del Ministerio de Salud provincial, existen 300 cupos para cubrir de manera urgente. Se trata de malas condiciones de trabajo. Las especialidades que más se necesitan son pedriatras, neonatólogos, obstetras, terapistas y parteros. 

La consecuencia de esta carencia es el cierre de los servicios en algunos centros médicos tales como la maternidad y neonatología del hospital Fiorito de Avellaneda; el área de pediatría del Perón de esa ciudad; el servicio de anatomía patológica del Alende de Mar del Plata y la terapia intensiva del Meléndez de Adrogué.

Según quienes permanecen en los hospitales, los profesionales no prefieren el sector estatal ya que hay problemas edilicios y gremiales. Sin embargo, oficialmente se asegura que la falta se registra también en los privados.

Zulma Ortiz, la ministra de Salud, dijo que se convocará a los médicos para revisar las condiciones laborales y diagramar un programa de estímulos e incentivos.


En Buenos Aires faltan médicos y enfermeras en los Hospitales lo cual genera conflictos



Presentaron un plan que busca proteger a los integrantes de los equipos de salud hospitalarios como a los pacientes, ante directores y jefes de guardia de 31 establecimientos públicos.
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, presentó un plan en el marco de la crisis de inseguridad que se vive los hospitales bonaerenses. Presentaron un plan que busca proteger a los integrantes de los equipos de salud hospitalarios como a los pacientes, ante directores y jefes de guardia de 31 establecimientos públicos.
El plan piloto se desarrollará en tres fases y dispone la creación, por primera vez, de la figura del "coordinador de seguridad hospitalaria", dependiente de la Superintendencia de Planeamiento y Operaciones Policial de la cartera de Seguridad.
La directora del Hospital Interzonal General de Agudos "Abraham Piñeyro" de nuestra ciudad, doctora Alicia Ramallo, se reunió con pares y funcionarios provinciales para abordar una problemática que tiene larga data en las entidades sanitarias bonaerenses: las situaciones de violencia en los nosocomios.
Al respecto, manifestó que "se habló de reforzar la seguridad con la policía, que debe actuar, según dijo el ministro Ritondo, sobre los hechos de violencia. Se habló también de un botón antipánico y de tener las cámaras en perfectas condiciones, poniéndolas en los lugares claves. Además se habló de contar con un grupo de mediación, algo que para nosotros es un poco más difícil de armar con la gente que tenemos acá adentro. Necesitás abogados, psicólogos, trabajadores sociales, todo un equipo que hay que armar y no se pueden pagar horas extras. Hay que capacitarse ya que ser mediador no es tan fácil. Nosotros tenemos gente, pero tendríamos que capacitarla en mediación y cumplir con ciertos horarios. De cualquier manera vamos a tratar de formarlo con lo que tenemos y nos va a llevar un tiempo. Para la Provincia, según el ministro, es un plan piloto y van a comenzar con 31 hospitales, donde estaríamos incluidos".
Hechos de violencia. La directora confesó que, en los últimos días, se dieron algunos hechos graves de violencia dentro del Hospital.
Luego, Ramallo reseñó que "sabemos que hubo hechos de violencia. Hay situaciones que llevan al conflicto, que no dependen de nosotros. Tenemos falta de recursos humanos y no podemos dar una respuesta rápida, nos faltan médicos, enfermeras, lo cual también genera conflicto porque el paciente quiere que lo atiendas rápido. Estamos tratando que se resuelvan situaciones para que no se generen conflictos".
"Hay una crisis en la educación que es marcada, y pasa por ahí gran parte de esto. Los hechos de violencia se han venido repitiendo. Acá tenemos policías en el interior del Hospital, hemos puesto rejas y no podemos dejar que sigan golpeando a nuestro personal. Si entramos dentro del Plan de Seguridad de la Provincia nos mandarán más policías. Pero la solución no pasa por ahí", añadió.

Enfermería y responsabilidad política

En breve estaremos en el mes mundial de la salud, es una gran oportunidad para llevar adelante estrategias para transmitir de forma clara ...