La crisis sanitaria y económica a consecuencia de la COVID-19 ha demostrado muchas carencias en un amplio del espectro de la sociedad. Se ha amplificado la vulnerabilidad de las personas más frágiles, y evidenciado la falta de igualdad de oportunidades en el acceso universal a la atención sanitaria.
La evidencia apunta a que estamos en una Sindemia, por lo que urge promocionar la igualdad de acceso efectiva a los cuidados. Y si es cuestión de cuidados, es cuestión de las enfermeras y enfermeros.
Es necesario un cambio de enfoque que implique a profesionales en enfermería, en el diseño de políticas sustentables y modelos de cuidados integrales y centrados en las personas, reconociendo su diversidad y autonomía plena.
Esta emergencia sanitaria es de dimensiones se podría considerar inimaginable, pero cuando acontece con esta magnitud es fundamental que emerja un liderazgo efectivo, un liderazgo capaz de resolver con inmediatez e imaginación todos los problemas no previstos que se originan, este liderazgo lo puede y lo debe acompañar las enfermeras y los enfermeros en las políticas de salud comunitaria.
30 de junio de 2021, Lic. Sandro Ortega
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