Trabajadores de la salud exigen pago de aguinaldos
Trabajadores, empleados, obreros, enfermeros y laboratoristas de la red de salud del estado Táchira protestaron afuera del Hospital Central Universitario José María Vargas para exigir el pago de aguinaldos y otras bonificaciones.
Todas las áreas, excepto las emergencias pediátrica y general, estuvieron sin personal más de dos horas.
Joel Contreras, director del centro asistencial, hizo un llamado al ministro de Salud, Carlos Rotandoro, para que evite la paralización de los servicios del hospital.
El Ministerio de Salud recomendó a los funcionarios sanitarios de Táchira que busquen dinero por su cuenta para pagar los beneficios de fin de año.
Los directores de la Corporación de Salud del estado viajaron a Caracas para solicitar una cita con el ministro y gestionar los recursos que faltan.
"La situación del hospital central es muy difícil en este momento. El Ministerio de Sanidad sólo envió 12 millardos para pagar aguinaldos y faltan 18 millardos, es decir, que prácticamente se requieren dos tercios del total. En Caracas dijeron que debemos buscar la plata en la localidad para completar lo correspondiente a los aguinaldos, pero no tenemos de dónde reunir. La única solución, por la paz del hospital y el buen servicio para los usuarios, es que las autoridades envíen esos 18 millardos", dijo Contreras.
Señaló que aproximadamente 3.000 empleados de ese centro asistencial de los 4.800 que hay en el estado dependen del Ministerio de Salud.
"En estos momentos se prepara una marcha, una protesta y un paro. Pido que por favor oigan el clamor de los empleados y obreros para que no se pare el hospital", agregó.
Afuera del centro asistencial los manifestantes bloquearon la entrada principal y sólo permitieron el paso de ambulancias.
"Queremos hacerle un llamado al Presidente de la República con mucho respeto: revise bien el mapa geográfico por si de repente se le olvidó que existen en el estado Táchira aproximadamente 97 ambulatorios, 10 hospitales y 4.800 trabajadores que esperamos que nos paguen las bonificaciones de fin de año", dijo Melsíades Delgado, representante sindical de la salud.
Aseguró que esperarán respuestas de los representantes de Corposalud sobre las diligencias hechas ante el ministerio antes de comenzar el conflicto laboral.
Salud en riesgo. Trabajadores del Servicio Autónomo de Oncología del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto, estado Lara, protestaron ayer para pedirle al gobernador Henri Falcón que atienda los problemas contractuales de los empleados de la unidad y la falta de equipos.
Jackeline Díaz, coordinadora del servicio de enfermeras de ese servicio, explicó que 64 trabajadores entre personal administrativo y obrero exigen que sean reconocidos los beneficios que les corresponden porque dependen de la gobernación.
"No nos quieren reconocer beneficios que reciben otros empleados, como los bonos que nos deben desde abril y julio", dijo. Añadió que no les han cancelado los 120 días de utilidades ni los 100 de vacaciones, como lo hicieron al resto del personal que depende del Ejecutivo regional.
Informaron que la unidad no cuenta con todos los equipos para funcionar. "Trabajamos con materiales altamente tóxicos, estamos exponiendo nuestras vidas, y el laboratorio no tiene los reactivos necesarios para garantizar los tratamientos", acotaron las enfermeras
Todas las áreas, excepto las emergencias pediátrica y general, estuvieron sin personal más de dos horas.
Joel Contreras, director del centro asistencial, hizo un llamado al ministro de Salud, Carlos Rotandoro, para que evite la paralización de los servicios del hospital.
El Ministerio de Salud recomendó a los funcionarios sanitarios de Táchira que busquen dinero por su cuenta para pagar los beneficios de fin de año.
Los directores de la Corporación de Salud del estado viajaron a Caracas para solicitar una cita con el ministro y gestionar los recursos que faltan.
"La situación del hospital central es muy difícil en este momento. El Ministerio de Sanidad sólo envió 12 millardos para pagar aguinaldos y faltan 18 millardos, es decir, que prácticamente se requieren dos tercios del total. En Caracas dijeron que debemos buscar la plata en la localidad para completar lo correspondiente a los aguinaldos, pero no tenemos de dónde reunir. La única solución, por la paz del hospital y el buen servicio para los usuarios, es que las autoridades envíen esos 18 millardos", dijo Contreras.
Señaló que aproximadamente 3.000 empleados de ese centro asistencial de los 4.800 que hay en el estado dependen del Ministerio de Salud.
"En estos momentos se prepara una marcha, una protesta y un paro. Pido que por favor oigan el clamor de los empleados y obreros para que no se pare el hospital", agregó.
Afuera del centro asistencial los manifestantes bloquearon la entrada principal y sólo permitieron el paso de ambulancias.
"Queremos hacerle un llamado al Presidente de la República con mucho respeto: revise bien el mapa geográfico por si de repente se le olvidó que existen en el estado Táchira aproximadamente 97 ambulatorios, 10 hospitales y 4.800 trabajadores que esperamos que nos paguen las bonificaciones de fin de año", dijo Melsíades Delgado, representante sindical de la salud.
Aseguró que esperarán respuestas de los representantes de Corposalud sobre las diligencias hechas ante el ministerio antes de comenzar el conflicto laboral.
Salud en riesgo. Trabajadores del Servicio Autónomo de Oncología del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto, estado Lara, protestaron ayer para pedirle al gobernador Henri Falcón que atienda los problemas contractuales de los empleados de la unidad y la falta de equipos.
Jackeline Díaz, coordinadora del servicio de enfermeras de ese servicio, explicó que 64 trabajadores entre personal administrativo y obrero exigen que sean reconocidos los beneficios que les corresponden porque dependen de la gobernación.
"No nos quieren reconocer beneficios que reciben otros empleados, como los bonos que nos deben desde abril y julio", dijo. Añadió que no les han cancelado los 120 días de utilidades ni los 100 de vacaciones, como lo hicieron al resto del personal que depende del Ejecutivo regional.
Informaron que la unidad no cuenta con todos los equipos para funcionar. "Trabajamos con materiales altamente tóxicos, estamos exponiendo nuestras vidas, y el laboratorio no tiene los reactivos necesarios para garantizar los tratamientos", acotaron las enfermeras
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