La Unión Nacional de Servicios de Enfermería (UNASE), denunció que la mayoría del personal de enfermería que fue pensionado y jubilado, lo sacaron de la nómina de Salud Pública por negarse recibir la pensión de diez a 13 mil pesos, equivalente a menos del 50% de su salario.
La presidenta de la UNASE, Rafaela Figuereo, dijo que pese a ganar salarios entre 20 a 30 mil pesos mensuales unas 237 enfermeras fueron pensionadas con diez a 13 mil pesos que no les alcanzan para cubrir sus necesidades básicas.
Manifestó que la situación se les agrava porque una vez pensionadas son retiradas de inmediato del sistema de salud.
"En vez de las enfermeras pensionadas irse a sus casas con un salario decente, lo que el gobierno hace es prolongarles las limitaciones y sufrimientos que padecen a lo largo de tantos años de servicios y entrega a la ciudadanía en los hospitales públicos del país," expresó la dirigente gremial en un comunicado de prensa.
Figuereo solicitó al gobierno a través de los ministerios de Hacienda y Salud Pública buscar solución al problema que existe con el personal de enfermería que fue pensionado el pasado mes de mayo.
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