Denuncia que el retroceso profesional y laboral supone un riesgo para la seguridad de los pacientes y pone de manifiesto la inacción de las diferentes administraciones sanitarias para aplicar los logros obtenidos por profesión enfermera en los últimos años. "Por cada médico en paro se quedan sin trabajo diez enfermeras.", asegura la presidenta de la organización provincial, Carmen Sánchez Macarro. Por eso, adoptará cualquier medida "en defensa de los pacientes, incluida la vía judicial"
El Colegio de Enfermería de Salamanca confirma que la precaria situación profesional de los enfermeros de la provincia charra es muy similar a la denunciada en las jornadas 'Enfermería: situación crítica', celebradas recientemente por la Organización Colegial de Enfermería y en las que el Colegio salmantino ha participado activamente. Tras las conclusiones obtenidas en esta reunión se quiere trasladar a los responsables sanitarios y a la sociedad salmantina un "contundente basta ya", tal y como ha señalado la presidenta de la organización provincial, Carmen Sánchez Macarro, al destacar los cinco grandes problemas que afectan a la profesión: paro, sobrecarga asistencial, prescripción enfermera, especialidades enfermeras y grado.
En primer lugar, más de 50.000 enfermeras han perdido su puesto de trabajo por culpa de los recortes sanitarios. "Por cada médico en paro se quedan sin trabajo diez enfermeras. Basta ya de que sean los enfermeros quienes paguen injustamente, con sus puestos de trabajo, los recortes de una sanidad que sigue manteniendo estructuras políticas e ineficacias de gestión difíciles de justificar. La enfermería no es el problema si no la solución para una buena parte de los problemas que actualmente vive la sanidad", explica.
Por eso, el colegio oficial denuncia que ahorrar en enfermeras es la decisión más arriesgada y menos rentable para el Sistema Nacional de Salud. "Se están vulnerando las líneas rojas establecidas, poniendo en riesgo la salud, la seguridad y la vida, de los pacientes. Vamos a vigilar que los centros sanitarios no traspasen las líneas rojas y denunciaremos de oficio a quienes lo hagan. Basta ya de traspasar las líneas rojas en cuanto a los ratios mínimos de enfermeras-paciente. Reducir el número de enfermeras más allá de los estándares establecidos por el propio Sistema Nacional de Salud multiplica seriamente el riesgo para la seguridad, la salud y la vida de los pacientes", afirma.
Para justificarlo, se alude a múltiples estudios internacionales, y especialmente el realizado por los profesores Linda Aiken y Walter Sermeus en más de 6.000 hospitales de todo el mundo, que demuestran con evidencia científica que reducir el número de enfermeras incrementa las complicaciones, los días de hospitalización, los costes por paciente y, finalmente, la mortalidad. "Ante la vulneración de las líneas rojas de la seguridad de los pacientes, la Organización Colegial de Enfermería adoptará todas las medidas en defensa de los pacientes, incluida la vía judicial. No vamos a ser cómplices de una situación crítica y económicamente injustificable que puede poner en riesgo vidas humanas y denunciaremos de oficio a quienes lo hagan", explica el Colegio de Enfermería.
Por eso, continúa, "basta ya de retrasar el desarrollo de la prescripción enfermera, poniendo en serio riesgo el trabajo de una profesión que asume, por responsabilidad y para que el Sistema Nacional de Salud siga funcionando, competencias para las que no tienen cobertura jurídica desarrollada. No podemos seguir asumiendo funciones y responsabilidades para las que no tenemos seguridad jurídica y de las que se están derivando denuncias contra enfermeras que les están llevando a la inhabilitación profesional". Así, si no se halla una solución, a partir del 17 de junio la enfermería se limitará a realizar aquellas funciones que la ley les reconoce, lo que lamentablemente supondrá graves trastornos para los pacientes y para el Sistema Nacional de Salud. "Basta ya de que nuestra responsabilidad se pague con desprecios, precariedad y retroceso profesional", conclye.
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