El Salvador.-

La dura tarea para ejercer la enfermería Cuando Irma Elena Mónico obtuvo su título de tecnóloga en enfermería estaba contenta, quería poner en práctica lo que había aprendido, pero se llevó una gran decepción, pues en el hospital donde laboraba desde hacía ocho años como auxiliar, no había plazas para lo que su formación demandaba. Irma se sintió frustrada, había estudiado más de siete años para nada, incluso sacó un diplomado en inglés, pero las oportunidades que ella buscaba no llegaban. Se sentía estancada. Ella ingresó en 1995 al hospital Zacamil, en Mejicanos, como auxiliar de enfermería. Creía que al tener el título de tecnóloga podría escalar dentro de la institución y optar a una plaza de enfermera, pero no fue así. Al terminar su año social, volvió a ejercer como auxiliar. "Era hasta cierto punto sentimental, uno se esfuerza y quiere salir adelante. Una auxiliar no puede entrar a cirugías. Yo atendía paciente de bajo riesgo, pero quería hacer otras cosas para las que me había preparado", expresó Mónico. Con forme pasaron los meses, le comentaron que había una oportunidad en Bienestar Magisterial, pero tenía que renunciar a su plaza, que era por ley de salarios. Sus deseos de ejercer la llevaron a aceptarlo, al cabo de un tiempo se rumoró que Bienestar Magisterial iba a desaparecer, por lo que decidió cambiarse y fue contratada como enfermera comunitaria, sin embargo, no le permitieron irse del hospital y continúo ahí. Ahora su problema es que después de 14 años no tiene una plaza de ley de salarios, sino un contrato con el Gobierno. "Tengo compañeras que tienen 14 años de laborar con plazas de auxiliar siendo enfermeras, pero no hay oportunidades en los centros", agregó.