No hay días para enfermarse y mucho menos en estado de epidemia. Ayer, los nosocomios se encontraban saturados. Los pacientes en su mayoría presentan signos de alarma. Faltan enfermeros, médicos y camas.
El dengue no para, sigue atacando, y la cantidad de pacientes que consultan en los hospitales, llenando los pasillos, consultorios y salas de internación dan muestra de ello.
En un recorrido por el Hospital de Barrio Obrero y el Maternoinfantil San Pablo se pudieron observar el colapso y la necesidad urgente de reforzar el plantel de recursos humanos para dar respuesta.
"Hay una sola enfermera atendiendo en urgencias de pediatría, más a los internados y otras que vienen a consultar. Estamos pidiendo personal de contingencia, de refuerzo, por lo menos uno más para cada servicio", urgió la licencia Venancia González, jefa del departamento de Enfermería del nosocomio de Barrio Obrero.
En el área de urgencias, en el día de ayer, tenían 6 personas, más 16 pacientes internados con dengue en otro sector, todos siendo cuidados por una sola enfermera.
"Urgente necesitamos más enfermeros, porque no damos abasto. Que se contrate a más. Tenemos reactivos, pero lo que nos faltan son los recursos humanos. Las camas también están saturadas, falta lugar", comentó la licenciada Nidia Gómez.
Además del dengue, se suman las afecciones respiratorias y otras enfermedades que son atendidas en el área de urgencia sin discriminación alguna, conforme indicó.
BARRIO SAN PABLO. En el caso del Maternoinfantil San Pablo, la doctora Thania López manifestó que diariamente atienden a un promedio de 60 a 100 pacientes en urgencias. "Son casos sospechosos de dengue. Se crea una psicosis, vienen con cuadros gripales y refieren dolores de cabeza, de cuerpo y ya asocian a esa enfermedad por temor", indicó la profesional.
En tanto, la doctora Lourdes Cano expresó su preocupación por la cantidad de pacientes que llegan al centro de salud y la poca cantidad de médicos clínicos con que cuentan.
Aseguró que todos los profesionales que están de turno van rotando, según sea la necesidad, a fin de atender los casos de urgencia.
Añadió que en su mayoría y por tratarse de un hospital maternoinfantil se da prioridad a las embarazadas y a los niños, pero que "sí o sí" terminan atendiendo a todos los que consultan. En ese sentido, dijo que en el nosocomio predominan los ginecobstetras.
"Necesitamos más médicos clínicos, porque son quienes más manejan los diferentes cuadros y son los que podrán derivar mejor los casos", resaltó López.
En ambos nosocomios aseguraron que, aunque no tengan disponibilidad de camas, si la situación lo requiere, ven la manera de internar a los afectados y generar los espacios necesarios.
En un recorrido por el Hospital de Barrio Obrero y el Maternoinfantil San Pablo se pudieron observar el colapso y la necesidad urgente de reforzar el plantel de recursos humanos para dar respuesta.
"Hay una sola enfermera atendiendo en urgencias de pediatría, más a los internados y otras que vienen a consultar. Estamos pidiendo personal de contingencia, de refuerzo, por lo menos uno más para cada servicio", urgió la licencia Venancia González, jefa del departamento de Enfermería del nosocomio de Barrio Obrero.
En el área de urgencias, en el día de ayer, tenían 6 personas, más 16 pacientes internados con dengue en otro sector, todos siendo cuidados por una sola enfermera.
"Urgente necesitamos más enfermeros, porque no damos abasto. Que se contrate a más. Tenemos reactivos, pero lo que nos faltan son los recursos humanos. Las camas también están saturadas, falta lugar", comentó la licenciada Nidia Gómez.
Además del dengue, se suman las afecciones respiratorias y otras enfermedades que son atendidas en el área de urgencia sin discriminación alguna, conforme indicó.
BARRIO SAN PABLO. En el caso del Maternoinfantil San Pablo, la doctora Thania López manifestó que diariamente atienden a un promedio de 60 a 100 pacientes en urgencias. "Son casos sospechosos de dengue. Se crea una psicosis, vienen con cuadros gripales y refieren dolores de cabeza, de cuerpo y ya asocian a esa enfermedad por temor", indicó la profesional.
En tanto, la doctora Lourdes Cano expresó su preocupación por la cantidad de pacientes que llegan al centro de salud y la poca cantidad de médicos clínicos con que cuentan.
Aseguró que todos los profesionales que están de turno van rotando, según sea la necesidad, a fin de atender los casos de urgencia.
Añadió que en su mayoría y por tratarse de un hospital maternoinfantil se da prioridad a las embarazadas y a los niños, pero que "sí o sí" terminan atendiendo a todos los que consultan. En ese sentido, dijo que en el nosocomio predominan los ginecobstetras.
"Necesitamos más médicos clínicos, porque son quienes más manejan los diferentes cuadros y son los que podrán derivar mejor los casos", resaltó López.
En ambos nosocomios aseguraron que, aunque no tengan disponibilidad de camas, si la situación lo requiere, ven la manera de internar a los afectados y generar los espacios necesarios.
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