Luego de 30 años de abrazar y dedicarse a la enfermería, Gloria Ojeda y Atanasia Torres, se retiran para descansar tras un largo periodo de labor y entrega al cuidado de recién nacidos, del Centro Materno Infantil del Hospital de Clínicas, dependiente de la FCMUNA.
Por tal motivo, la institución a la cual sirvieron por tres décadas rindió un emotivo homenaje a estas dos mujeres. "Estas profesionales siempre se destacaron en aportar lo mejor en el trabajo", sostuvo el Prof. Dr. Ramón Mir, Jefe del Neonatología del CMI. A modo anecdótico, afirmó que Gloria Ojeda fue quien le enseño su primer catéter umbilical venoso en su época de residente.
Por otro lado, menciono que Atanasia siempre fue una persona muy callada y trabajadora, siempre con ganas de ayudar. "No queda más que decir que vamos extrañar su calidad de persona y de trabajo", dijo finalmente el Doctor Ramón Mir.
"Partimos con el espíritu satisfecho de haber cumplido parte de nuestra misión, para la que tuvimos que hacer a un lado muchas cosas; dejamos nuestros lugares para que los nuevos profesionales puedan dedicarse a esta labor tan humana, que es la del servicio al paciente", coincidieron ambas agasajadas durante el emotivo homenaje.
El Departamento ofreció una misa de acción de gracias, seguido de un brindis entre todos los presentes y la posterior entrega de un certificado de reconocimiento a cada una.
Tres décadas de incansable labor
Tanto Gloria como Atanasia llegaron, en su horario laboral a desempeñar, por última vez, sus labores en el Hospital de Clínicas, ya que las mismas han sido beneficiadas con la jubilación, tras haber superado los años laborales requeridos.
En los años 1980 y 1989 se incorporaban a la Institución como auxiliares de la enfermería en el Departamento de Neonatología; es importante destacar que en esos tiempos el país estaba carente de profesionales de enfermería, generando así un déficit de ese talento humano tan fundamental en el sistema de salud de nuestro país.
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