18 sept 2010

USA.-

Un informe revela el alza de las agresiones a médicos en hospitales de EU
http://www.generaccion.com/usuarios/32822/informe-revela-alza-agresiones-medicos-hospitales-eu
Un hombre armado hirió de gravedad a un doctor en el hospital Johns Hopkins, mató a su madre y se quitó la vida

Un hombre armado hirió de gravedad a un doctor del hospital Johns Hopkins en Baltimore, Maryland, y luego mató a su madre y se suicidó, dice la policía. Éste es sólo un ejemplo de los cada vez más habituales actos violentos en centros de salud de Estados Unidos.

Los hospitales son ollas de presión pues las personas están angustiadas con frecuencia, mentalmente perturbadas o intoxicadas con drogas o alcohol en un ambiente altamente estresante. Todos esos factores representan peligros posibles para los empleados de salud.

El doctor del hospital, cuyo nombre no fue revelado, fue trasladado a cirugía por una herida abdominal y se espera que sobreviva, según la policía.

En otro incidente de la semana pasada, un hombre rompió una silla y usó una de sus patas para golpear a una enfermera de 53 años en un hospital de Valley Stream, Nueva York. La enfermera tuvo que ser operada en el ojo después de sufrir heridas en la cabeza, la cara y el cuello, según reportó Newsday.

En febrero, un hombre armado abrió fuego en una sala de trauma en un hospital de Laurinburg, Carolina del Norte, después de una pelea de bar, según WRAL, afiliada de CNN. El año pasado, un hombre que estaba insatisfecho con el tratamiento a su madre en un hospital de Columbus, Georgia, mató a una de sus enfermeras y a otro empleado antes de que la policía lo hiriera por bala, según los reportes de prensa locales.

Un número cada vez mayor de agresiones físicas ocurren en los departamentos de emergencia, según a la Asociación Internacional de Seguridad de la Salud.

Una encuesta divulgada el año pasado encontró que más de la mitad de enfermeras y enfermeros de salas de emergencia han sido escupidos, empujados, arañados y agredidos físicamente más de 20 veces en los últimos tres años, según los resultados de la Asociación de Enfermeros de Emergencia.

"No sorprende que haya violencia en los departamentos de emergencia, pero sí sorprende la magnitud de la violencia", dijo William Briggs, ex presidente de la asociación. "Dos tercios de las enfermeras y enfermeros encuestadas sufrieron un acto de violencia física".

"Nunca irías al supermercado y dirías 'los tomates no son lo suficientemente buenos' y golpearías al cajero sin quedar impune. Eso es exactamente lo que pasa en los departamentos de emergencia por todo Estados Unidos".

Rita Anderson, una enfermera de emergencias, dijo que ha sido arañada, mordida, escupida y golpeada en la cara tan duro que su mandíbula se rompió. Luego el agresor le dijo: "Lo siento. Estaba cansado de esperar".

Las largas esperas en una situación de alto estrés pueden agravar la ansiedad en las salas de espera y en los hospitales.

Al principio de su carrera de 43 años, contó Anderson, las enfermeras eran usualmente golpeadas por una persona con demencia o problemas mentales o que estaba bajo la influencia de alguna sustancia.

"Pero recientemente, en los últimos 10 o 15 años, ése no es el caso", señaló Anderson. "Las personas simplemente están cansadas de esperar o simplemente están molestas por no recibir la atención que consideran aceptable. En vez de decir algo, su respuesta es golpear, gritar y escupir".

"Hay una tendencia creciente de violencia", dijo la doctora Leigh Vinocur, vocera del Colegio Estadounidense de Médicos de Emergencias. "Las salas de emergencia son como un microcosmos de la sociedad. Hay una tendencia creciente de violencia en las salas de emergencia".

Vinocur, que fue estrangulada por un paciente, ha observado algunos de los incidentes después de trabajar en los departamentos de emergencia urbanos de Baltimore, Maryland, y Detroit, Michigan.

"Hay riesgos. No lo compararía con lo que los policías tienen que hacer todos los días, pero es parte del trabajo. Los asuntos de los que nos ocupamos en la sala de emergencia son: abuso de sustancias, traumas psiquiátricos, agresiones y heridas de balas y puñaladas relacionadas con violencia de pandillas. Ésas son heridas violentas y, en ocasiones, la violencia se transmite a la sala de emergencias.

Problema en ascenso

"Las instituciones de salud enfrentan en la actualidad un aumento constante en la tasa del crimen, incluyendo crímenes violentos como agresión, violación y homicidio", según un informe de 2010 de la Base de Datos de Monitoreo de Hechos de la organización Joint Comission.

La Joint Comission, que acredita y certifica más de 18,000 organizaciones y programas de salud, recopiló las cifras de informes voluntarios.

Su base de datos indica el mayor número de agresiones reportadas, violaciones y homicidios en los últimos tres años: 36 incidentes en 2001, 41 en 2008 y 33 en 2009. Se cree que el número real de casos es mayor.

"Las personas están bajo mucho estrés cuando están enfermas y cuando llegan a las salas de emergencia", dijo el doctor Paul Schyve, vicepresidente de la Joint Comission. "Hay casos en los que esencialmente una guerra de pandillas es llevada de las calles a las salas de emergencia porque alguien resultó herido".

Los trabajadores de salud tienen que balancear su propia seguridad y la de sus pacientes. Los hospitales tienen protocolos para enfrentar pacientes potencialmente peligrosos al tener varios miembros del personal o guardias de seguridad acompañando a los empleados o vigilando al paciente para que no pueda herir a otros o a él mismo.

Algunos hospitales han tomado medidas más estrictas, como el hospital Henry Ford en Detroit, que implementó detectores metálicos. En los primeros seis meses de funcionamiento, 33 revólveres, 1,324 cuchillos y 97 aerosoles químicos fueron confiscados, según el Colegio Estadounidense de Médicos de Emergencias.

El grupo lista posibles soluciones, como funcionarios de seguridad, cámaras de circuito cerrado de televisión con observadores entrenados las 24 horas del día, botones de alerta y mejor control en la entrada a los departamentos de emergencias.

"No es algo que no se pueda solucionar", dijo Briggs, enfermero del Centro Médico Tuffs. "Hay programas de prevención que han llevado a menos incidencia de la violencia al entrenar a personas a reconocer las señales tempranas antes de que se convierta en un hecho de amenaza física. Parte de esto es tratar de asegurarse de que haya la vigilancia adecuada, cámaras, control de acceso, y de que haya un plan en caso de que se presente una situación con rehenes".

CNNmexico

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