Enfermería, noble oficio
Mariela Suárez. Foto: El Sol de Tulancingo.
El Sol de Tulancingo
4 de enero de 2012
Por Concepción Ocádiz
Tulancingo, Hidalgo.- Mariela Abigail Suárez Márquez siempre quiso ser enfermera.
Soñaba, desde pequeña, desempeñarse en este noble oficio que, por cierto, tiene su celebración el próximo 6 de enero.
Talentosa y joven, obtuvo uno de los mejores promedios en la Escuela Liceo Americano Bilingüe; actualmente se encuentra realizando su servicio social en el Hospital General.
"La verdad estoy muy contenta por lo logrado en mi vida, hasta ahora".
Ella tiene la premisa de que cada día está lleno de retos, más por el hecho de que ahora tiene otro motivo por el cual seguir adelante.
Se enteró hace unos meses que será madre, a sus 20 años.
"Estar embarazada no impide mis ganas de luchar y cuenta mucho para mí tener el respaldo de mi pareja y de mi familia".
"Mucho agradezco a Dios que me haya bendecido con el bebé que crece en mi".
"También, que siga prestando mi servicio social en el Hospital Tulancingo, una de las mejores instituciones de Salud en el Estado".
Para Mariela, quien durante los fines de semana se encuentra atendiendo a pacientes en el General, la disciplina es uno de los aspectos más importantes, pero este valor debe ir acompañado de mucho respeto, institucionalidad y amor a todo lo que uno emprenda.
"Desde que tenía 10 años me empezó a gustar la enfermería".
"Acompañaba a mi mamá a ver cómo ponía inyecciones o hacer curaciones, y desde ahí me surgió la idea".
"La carrera, sin duda, es de muchos sacrificios, pero bien vale la pena ser parte de ella; siempre con la frente en alto por hacer bien las cosas".
"Ser enfermera es un don que Dios me dio".
La paciencia y la humildad son la bandera de todas las personas que nos dedicamos a esto, agrega esta joven originaria de Tulancingo.
Mariela gusta en sus ratos libres de ver películas, leer y escuchar buena música. Pero, además, salir con su pareja a caminar y disfrutar de paisajes: "Eso me relaja muchísimo y, además, es importante estar tranquila".
Proveniente de la cultura del esfuerzo que le enseñaron sus papás José Luis Suárez y Lidia Márquez, esta chica planea seguir creciendo en todos los aspectos.
Valorar a nuestros padres es algo que nunca debemos abandonar, dice Mariela. "Aprendes tanto de ellos, son tus pilares. Sin duda, nunca se equivocan cuando te dan un consejo".
"Siempre he creído que lo mejor está por venir, por muy difícil que luego sea el panorama. Siempre brilla el sol".
Tulancingo, Hidalgo.- Mariela Abigail Suárez Márquez siempre quiso ser enfermera.
Soñaba, desde pequeña, desempeñarse en este noble oficio que, por cierto, tiene su celebración el próximo 6 de enero.
Talentosa y joven, obtuvo uno de los mejores promedios en la Escuela Liceo Americano Bilingüe; actualmente se encuentra realizando su servicio social en el Hospital General.
"La verdad estoy muy contenta por lo logrado en mi vida, hasta ahora".
Ella tiene la premisa de que cada día está lleno de retos, más por el hecho de que ahora tiene otro motivo por el cual seguir adelante.
Se enteró hace unos meses que será madre, a sus 20 años.
"Estar embarazada no impide mis ganas de luchar y cuenta mucho para mí tener el respaldo de mi pareja y de mi familia".
"Mucho agradezco a Dios que me haya bendecido con el bebé que crece en mi".
"También, que siga prestando mi servicio social en el Hospital Tulancingo, una de las mejores instituciones de Salud en el Estado".
Para Mariela, quien durante los fines de semana se encuentra atendiendo a pacientes en el General, la disciplina es uno de los aspectos más importantes, pero este valor debe ir acompañado de mucho respeto, institucionalidad y amor a todo lo que uno emprenda.
"Desde que tenía 10 años me empezó a gustar la enfermería".
"Acompañaba a mi mamá a ver cómo ponía inyecciones o hacer curaciones, y desde ahí me surgió la idea".
"La carrera, sin duda, es de muchos sacrificios, pero bien vale la pena ser parte de ella; siempre con la frente en alto por hacer bien las cosas".
"Ser enfermera es un don que Dios me dio".
La paciencia y la humildad son la bandera de todas las personas que nos dedicamos a esto, agrega esta joven originaria de Tulancingo.
Mariela gusta en sus ratos libres de ver películas, leer y escuchar buena música. Pero, además, salir con su pareja a caminar y disfrutar de paisajes: "Eso me relaja muchísimo y, además, es importante estar tranquila".
Proveniente de la cultura del esfuerzo que le enseñaron sus papás José Luis Suárez y Lidia Márquez, esta chica planea seguir creciendo en todos los aspectos.
Valorar a nuestros padres es algo que nunca debemos abandonar, dice Mariela. "Aprendes tanto de ellos, son tus pilares. Sin duda, nunca se equivocan cuando te dan un consejo".
"Siempre he creído que lo mejor está por venir, por muy difícil que luego sea el panorama. Siempre brilla el sol".
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