Enfermeros asesinos:

Enfermeros asesinos: directorio de ASSE archiva investigación de las muertes

Por cuatro votos de sus cinco integrantes, el directorio de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) resolvió dar por finalizadas y archivar las actuaciones sobre los enfermeros asesinos que operaban en el Hospital Maciel

La decisión fue tomada en contra de la opinión del representante nacionalista en el directorio, Marcelo Sosa, quien entendió que todavía hay elementos que ameritan "profundizar" la investigación en lugar de archivarla.

Sosa, abogado de profesión,entiende que la acción "ó la omisión de algunos involucrados" podría también haber configurado conducta "dolosa. En el expediente surgen elementos que no han sido suficientemente aclarados y que ameritan una ampliación de la investigación administrativa o la instrucción de sumarios a más funcionarios para aclarar lo sucedido", dijo el nacionalista en declaraciones que publica el diario El Observador.

Por la afirmativa: "Es suficiente"

Los cuatro restantes directores de ASSE consideraron que "es suficiente" el trabajo de investigación administrativa realizado, producto de lo cual han sido retirados de sus cargos dos jerarcas cuyos sumarios siguen en proceso.

El expediente –que a la fecha supera las 2.000 fojas- pauta que hay un fuerte enfrentamiento de declaraciones entre el jefe de la Unidad de Cuidados Cardiológicos, Pedro Patritti, y la nurse coordinadora del Servicio, Ana Rondán, con la dirección del Hospital Maciel. Los dos primerosaseguran que habían alertado a las autoridades sobre un marcado aumento en la estadística de mortalidad de las unidades donde trabajaba uno de los enfermeros asesinos, y que incluso advirtieron que tenían sospechas por el comportamiento irregular de quien a la postre resultó ser uno de los homicidas.

Otro de los aspectos que sigue siendo confuso es la demorada actuación de la comisión auditora, que nombró la dirección para estudiar el aumento de muertes: formada en diciembre, recién se expidió a mitad de marzo, al día siguiente del homicidio de Santa Gladys Lemos, que hizo público el tema y horas después aparecía el primer informe oficial.